La crioterapia de retina es el procedimiento para tratar el desgarro o desprendimiento de retina, además de ser indicado para algunos casos como tumores intraoculares. En el siguiente blog, encontrarás mayor información de cómo se realiza este procedimiento, en qué consiste, cuándo se utiliza y cómo transcurre el proceso de recuperación.
¿En qué consiste la crioterapia de retina?
El tratamiento de congelación o crioterapia de retina consiste en la congelación del tejido situado en la parte blanca del ojo. Se trata de una intervención que utiliza anestesia local; además, es común que el médico tratante le pida utilizar gotas oftálmicas para disminuir la inflamación.
Igualmente, es necesario guardar reposo absoluto, y abstenerse de practicar actividades físicas muy exigentes, como levantamiento de pesas o ejercicios de alto impacto.
¿Cuándo está indicada la crioterapia de retina?
La Crioterapia de retina es un tratamiento recomendado para tratar desgarros en la retina, cuando éstos son difíciles de tratar con láser debido a su ubicación, o por la presencia de puntos opacos que disminuyen la capacidad visual. Asimismo, puede ser utilizada para desintegrar segmentos de retina sangrantes, que luego puedan complicarse y causar retinopatía diabética u otras afecciones vasculares relacionadas con la retina.
¿Cómo es la recuperación después de practicar la crioterapia de retina?
Después de un tratamiento de congelación de retina, es frecuente que el paciente perciba enrojecimiento, inflamación o edemas en el área de la retina.
Por ello, es imprescindible realizar un seguimiento exhaustivo y periódico del proceso de recuperación, para seguir la evolución de la cicatrización. En todo caso, si presentas alguna dificultad visual, acude al oftalmólogo de inmediato, reserva tu cita aquí.