Se entiende por queratectomía a la cirugía oftalmológica que implica la extracción de una parte de la superficie corneal. Se trata de la parte frontal del ojo, que permite el paso de la luz hacia el interior, pero cuando está dañada interfiere con la agudeza visual y en ocasiones, si no mejora con tratamientos de uso tópico, es necesario realizar una cirugía ocular.
Pero ¿cuándo es necesario realizar una queratectomía? y ¿cómo transcurre el proceso de recuperación? A continuación, encontrarás la respuesta a estas y otras preguntas en torno a este tema.
Queratectomía: Tipos
La queratectomía tiene el propósito de tratar diversas afecciones oculares, y mejorar la agudeza visual del paciente. En este sentido, se puede clasificar de la siguiente manera:
Queratectomía lamelar
Consiste en remover un segmento de la córnea. Esta intervención está indicada en pacientes que presentan daños en sólo una parte de la córnea, como infecciones o distrofia, que no han mejorado con otros tratamientos oftalmológicos. Asimismo, es un método que también puede ser utilizado como preparación previa para un trasplante de córnea, que consiste en la sustitución de una córnea dañada, por otra que ha sido donada.
Queratectomía fotorrefractiva
Este método de cirugía refractiva utiliza un láser excimer para arreglar o modificar la córnea con el propósito de corregir errores de refracción como miopía, astigmatismo e hipermetropía y como consecuencia, mejorar la agudeza visual.
Queratectomía superficial
Se realiza para mejorar la distrofia epitelial de la córnea, una condición que está asociada con la presencia de irregularidades en el epitelio, lo que afecta la capacidad visual del paciente.
Queratectomía: Proceso de recuperación
Tras una queratectomía, lo más recomendable es seguir de manera disciplinada todas las recomendaciones del oftalmólogo, para garantizar que el proceso de recuperación transcurra de manera adecuada. Esto, debido a que cada método tiene riesgos asociados; pero, en general, los más comunes son: Visión borrosa inmediatamente después de la operación, infecciones y problemas durante la cicatrización corneal.
Igualmente, algunos pacientes podrían percibir molestias, resequedad en el ojo, o experimentar sensibilidad a la luz. En cualquier caso, es importante acudir a una consulta oftalmológica previa a realizar la operación, solicita tu cita ahora. Todo esto, para plantearle al oftalmólogo cualquier duda o expectativa relacionada con la queratectomía.